Una gran parte de mi vida la he pasado viajando, entre carreras, retos y entrenos. Son muchos los meses que paso en mi Marco Polo. Para mí, la mejor forma de viajar es con la autocaravana, pues te da la libertad de vivir donde quieras y llevar todo lo que necesitas encima. 

Cuando preparaba el récord al Cervino, por ejemplo, estuve “acampado” con el Marco Polo en Cervinia, al pie de la montaña durante casi todo el mes de agosto para poder subir y bajar cada día, y poder tener mis cosas para ir a las carreras. También durante muchos inviernos el Marco Polo me ha acompañado para participar en competiciones, y eso que las condiciones pueden ser duras, con temperaturas frías de -15º y mucho material que secar cada día después de los entrenamientos. Pero siempre me he sorprendido de lo cómodo que he estado en estas condiciones dentro de la autocaravana. Durante esta década larga en la que he estado medio viviendo en ella, he aprendido algunos trucos para que los viajes sean más prácticos: 

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1. ¡ORGANIZARSE!

Cuando empezamos a hacer las maletas debemos mirar si esa pieza que estamos poniendo realmente la vamos a utilizar. Para mí, lo mejor es organizarlo en cajas que entren en el maletero. Una con la ropa (de deporte y normal), otra con material técnico (de escalada, bici, correr, esquí, etc.) y una tercera con complementos (guantes, gorros, gafas, etc.). Utilizo distintos armarios para ordenar el resto. En el de la cocina: la comida en el frigorífico y en uno de los cajones; en otro el material de limpieza y los platos; en un tercero todo lo relacionado con el aseo, las toallas, etc. Encima del maletero, siempre pongo el material de informática. Y en el vertical, todo el material de dormir (almohadas, duvet, y ropa de abrigo). De esta manera, no ocupa los espacios libres y está todo ordenado.

2. DURANTE EL VIAJE

Es muy importante comprar y organizar la comida con anterioridad, dejando la más fresca en el frigorífico, y entre los asientos de conductor y copiloto la que vamos a comer mientras conducimos. Os recomiendo comprar algunos bocadillos, fruta y mucho agua o zumos para el viaje, sino deberéis tirar de comida de gasolinera que es de peor calidad y más cara.

3. PARA DORMIR

Cuando hace mucho frío, por debajo de los 15º o 20º negativos, mi recomendación es dormir abajo. Por encima de esta temperatura, con un buen duvet, arriba se duerme muy bien y tenemos el espacio de debajo libre. No dejamos la calefacción abierta durante la noche sino que la encendemos un poco antes de ir a dormir (¡y muchas veces al cocinar la cena ya no hace falta encender la calefacción después!) y la programamos para que se encienda una hora antes de despertarnos. En verano, cuando hace mucho calor, buscad un lugar en la sombra para que el vehículo no se caliente demasiado.

4. BUSCAR DÓNDE DORMIREMOS

Es seguramente una de las claves para poder disfrutar al máximo del viaje, si bien lo que me gusta es dormir en cualquier lado para ser lo más eficiente. ¡La de veces que he dormido en el parking de un aeropuerto para no tener que madrugar o en una gasolinera para hacer una siesta de calidad durante un viaje largo! Pero si queremos disfrutar de la calma, os aconsejo buscar un lugar alejado del ruido, cerca de un punto de agua (río, lago o fuente) para lavarnos, y mirar a qué hora va a tocar el sol cuando amanezca. Hay además un montón de páginas web y apps que nos recomiendan sitios para dormir con una autocaravana.

5. VIAJAR CON FAMILIA Y NIÑOS

Estos viajes son sin duda un poco más complicados. Debemos organizarnos un poco mejor, pero se puede disfrutar incluso más. Cuando hace mucho calor lo mejor es dormir en lugares distintos - los niños arriba, con la red de seguridad, y los padres debajo - para poder estar más frescos. Durante el viaje normalmente viajamos de noche cuando la niña duerme y así se hace más llevadero para todos. Durante el día paramos a hacer una siesta cerca de la carretera. 

6. SECAR LA ROPA

Una de las claves durante el invierno es cómo secar todo el material que utilizamos día tras día: botas, guantes, pieles de foca, abrigo, etc. Si estoy viajando, lo que me funciona es poner el material mojado encima de las maletas o en la ventana para que se seque con el sol. Durante la noche al ir a dormir, os recomiendo colgarlo con unas cuerdas en el habitáculo inferior y dejar la calefacción durante una media hora para que se seque bien. Así, no tendréis que poneros las botas mojadas al día siguiente.

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